.

No quiero que nadie confunda esto con muchos de los otros blogs que hay que invitan a que uno quiera ser anoréxico o bulímico. Yo solo intento contar lo que no he podido contarle a nadie. Todo el mundo te juzga hagas lo que hagas, y preferiría poder desahogarme en un lugar donde pudiera ser yo misma sin necesidad de temer a cambio unos comentarios críticos del resto de la gente.
No creo que yo sea capaz de atraer a alguien al mundo de Ana y Mia, pero en el caso de que suceda, lo lamento, pues no era mi intención. Solo intento demostrar que esto puede parecer atractivo para gente descontenta con su cuerpo visto desde un punto de vista externo, pero si lo vives en primera persona, las cosas cambian.

No dejes que se apodere de ti.

No dejes que se apodere de ti.
Tú vales más que una imagen.

viernes, 15 de octubre de 2010

sueños




últimamente he estado bastante mal.


Así que se lo he vuelto a pedir a mi psicóloga. Le he dicho que no puedo más, que siento como no me recupero en absoluto. Y Belén me ha prometido hablar con el psiquiatra para ver si me pueden ingresar. Más o menos me ha contado de qué va eso, pero si alguna lo conoce con detalles, me gustaría que me ayudara.


Belén ha dicho que serían unos 30/40 días, aunque claro, todo depende de la persona. Habrá quienes necesiten más tiempo y habrá quienes no les haga falta esperar mucho.


Se hacen actividades. Hay clases. Hay terapias. Hay horarios para comidas y duchas. Hay un tiempo para relacionarse.


Creo que es de las mejores cosas que podría hacer.


Porque lo único que siento es que me pudro por dentro mientras engordo por fuera.


_______________________


La anorexia se basa en las mentiras. En fingir que no sucede nada. En fingir que estás bien. Engañamos tanto a los demás que acabamos engañándonos a nosotras mismas y nos creemos que matarnos de hambre es lo mejor para nosotras.




  • ¿qué harás cuando la gente vea cortes en tu piel?


  • ¿qué harás cuando te pillen llorar desconsoladamente por haber engordado?


  • ¿qué harás cuando ya no puedas adelgazar más?


  • ¿qué harás cuando te pregunten si te ocurre algo, si tienes cáncer o alguna otra enfermedad?


  • ¿qué harás cuando sigas viéndote igual de gorda con diez kilos menos que con diez kilos más?


No importa cuál sea tu respuesta a esas preguntas. Siempre será algo lejano a la realidad. Tejes tu mundo ideal, donde puedes perder tanto peso hasta ser más ligera que una pequeña pluma. Y todo es perfecto... hasta que te chocas de bruces contra la realidad.



martes, 12 de octubre de 2010

NECESITO AYUDA

No sé qué hacer. Estoy completamente desesperada. He vuelto a caer en las garras de la anorexia. Y no he luchado para impedírselo.
Me rindo.

Necesito apoyo, pero nadie contesta desde hace semanas. A veces me planteo el hecho de anunciar mi blog en el tuenti o algún tipo de red social para poder hablar con más gente como yo.
Porque necesito a alguien que me comprenda cuando digo que me corto porque me lo merezco, porque soy una inútil. Necesito a alguien que entienda qué es volver a vomitar. Necesito a alguien. A cualquiera que me escuche.

... nunca me he planteado tanto el suicidio.

lunes, 11 de octubre de 2010

Quiero gritar lo que soy, que todo el mundo me entienda, que dejen que sea como yo quiera. Que dejen de llamarme enferma y deprimida, aunque sea verdad. Ya sé que tengo una enfermedad. Ya sé que tengo depresión. ¿Tan duro es pedir que no me lo recuerden?

Me odio. Odio mi debilidad. Odio la falta de concentración. Odio las cuentas de calorías que hay siempre en mi cabeza. Odio el vómito que echo a veces porque quiero estar vacía. Odio no querer curarme.

Sólo hay dos cosas que me hacen sentir mejor. Hacerme daño físico y no comer.

Necesito ayuda. Necesito ánimos. Necesito que alguien diga en alta voz que voy a recuperarme.
Pero sólo hay silencio.

jueves, 7 de octubre de 2010

MORIRMORIRMORIRMORIRMORIRMORIRMORIR

Me han subido la dosis de antidepresivos.
Será por algo.

No estoy triste, pero no puedo estar contenta.
Esto es una felicidad sintética creada por pastillas.


No, ni siquiera.

Esto no llega a ser felicidad. Es un mero estado neutro, una inercia.
Un estar y no sentir.

Una caída sin frenos.
La mirada de los ojos de la muerte.
Una manzana podrida.
La última bocanada de aire antes de ahogarse.

Sí, eso es. Me ahogo.
Me ahogo en mi propio obeso cuerpo.


Los demás me engordan hasta que no pueda respirar, hasta que todos y cada uno de mis hermosos huesos queden ocultos bajo la piel.
Siento como recaigo. Como la anorexia vuelve a atraparme entre sus finas garras.


Siento que todo lo que hago está mal.


Viernes: hospital.
Miércoles: psicólogo.
Viernes: hospital.
Miércoles: psicólogo.
Viernes: hospital.
Miércoles: psicólogo.

Una rutina. Un intento de transformarme en alguien normal.

Mañana: hospital.
Pastillas. Tranquilizantes. Blanco.

Caigo. Caigo. Caigo. Caigo. Caigo.

No quiero vivir entre calmantes y antidepresivos.

Caigo. Caigo. Caigo. Caigo. Caigo.

No quiero vivir entre calorías.

Caigo. Caigo. Caigo. Caigo. Caigo.

No quiero vivir.