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No quiero que nadie confunda esto con muchos de los otros blogs que hay que invitan a que uno quiera ser anoréxico o bulímico. Yo solo intento contar lo que no he podido contarle a nadie. Todo el mundo te juzga hagas lo que hagas, y preferiría poder desahogarme en un lugar donde pudiera ser yo misma sin necesidad de temer a cambio unos comentarios críticos del resto de la gente.
No creo que yo sea capaz de atraer a alguien al mundo de Ana y Mia, pero en el caso de que suceda, lo lamento, pues no era mi intención. Solo intento demostrar que esto puede parecer atractivo para gente descontenta con su cuerpo visto desde un punto de vista externo, pero si lo vives en primera persona, las cosas cambian.

No dejes que se apodere de ti.

No dejes que se apodere de ti.
Tú vales más que una imagen.

jueves, 14 de julio de 2011

De vuelta.

Cerré el blog durante un tiempo, pero sentí una necesidad de volver a escribir. Para ser sincera, he creado otro blog, porque este me hace sentir muy atada a la anorexia. Obviamente, es un desastre, porque no sé de qué hablar y acabo de empezar (4 entradas)... pero confío en que vaya animándome a alejarme de este mundo.

No creo que se me haya echado en falta, pero he aprendido mucho mientras he estado fuera.
He visto que hay gente que quiere autodestruirse, gente que piensa que son correctas las cosas más absurdas, gente que influye mal sobre los demás metiéndoles ideas tontas en la cabeza.

A veces me he planteado rendirme, pero eso no haría nada. No quiero hundirme.
No hay muchas personas que me escuchen, pero agradezco a las que sí, y espero que poco a poco más personas lo hagan y piensen dos veces sobre la anorexia, la bulimia, o cualquier aspecto de la vida.

Bueno, aquí estoy, en verano, asfixiándome de calor y dispuesta a empezar de nuevo.
Espero que vosotros también os encontréis con fuerzas.